Advierten delito por disfrazarse de poli

Lanzan mensaje a quienes participan en las fiestas de Halloween vestidos de autoridad policiaca

Utilizar uniformes similares a los cuerpos de seguridad constituye un delito, por lo que autoridades solicitan a quienes acostumbran celebrar haloween, abstenerse de vestir prendas militares, policiacas o cualquier otra indumentaria relacionada con las fuerzas del orden.

Geovanni Barrios Moreno, Secretario de Seguridad Pública Municipal, señaló que dentro del código penal ya está tipificado como delito el portar insignias o uniformes de cualquier corporación de seguridad, por lo que jóvenes o adultos que sean sorprendidos podrían ser sometidos a proceso.

"Recordemos que la utilización de uniformes policiacos u oficiales es un delito, hay muchos disfraces que pueden utilizar pero lo que son de las fuerzas publicas son prohibidos, ya está tipificado como delito la utilización de insignias y uniformes oficiales" explicó

Destacó que con motivo de esta fecha celebrada por muchas familias en la frontera, se implementará un operativo especial en las principales avenidas, a fin de resguardar a las personas que junto a sus niños salen a pedir dulces, así mismo se brindará acompañamiento a través de los agentes de tránsito para evitar incidentes y culminar con un saldo blanco, sin embargo, señaló que para lograr dicho objetivo se requiere también de la colaboración de los padres de familia.

El funcionario solicitó a los tutores, hermanos o quienes vayan a acompañar a los menores a pedir dulces, a no perderlos de vista, mantenerse siempre cerca de ellos y verificar que los dulces o alimentos que reciban estén en un empaque sellado y seguro.

"Que tomen todas las precauciones necesarias con los niños que son los grupos más vulnerables, al momento que reciben algún dulce o alimento que sea verificado por los padres".

Finalmente, pidió a quienes suelen decorar tanto sus hogares como sus vehículos, a evitar hacer apologías de la violencia que se vive en la región, toda vez que resulta una práctica común, que si bien no constituye un delito, es importante mejorar la imagen de la ciudad y dejar atrás esa cultura.