Por más de una hora, un centenar de entre padres, madres y estudiantes esperaron bajo los candentes rayos del sol para que les tocara el turno y entrar al Auditorio Municipal para entregar documentación y recibir tarjeta del Banco Bienestar por becas federales que les fueron autorizadas.
La gente empezó a desesperarse y más aún cuando se percataron de que en el interior de las instalaciones había suficiente espacio para darles acomodo y evitar siguieran sufriendo los embates del clima.
Algunas de ellas entraron al lugar y le pidieron a una de las que participan en el programa federal de becas Benito Juárez, les permitiera ingresar al auditorio porque estaban muy incómodas de pie y finalmente les dejaron entrar.
Muchas sillas estaban ya vacías dentro del sitio, de ahí que algunas se acomodaron ahí y otras permanecieron paradas pero ya bajo la sombra y disfrutando de clima artificial.
Los alumnos ahí vistos haciendo fila, dijeron recibir sus estudios en escuelas de nivel preparatoria y muchos de ellos portaban el uniforme escolar.