Un mes después de la incursión de un grupo de personas liderados por Luis Díaz y que se atribuyeron la representación del Sindicato Industrial Autónomo de Maquiladoras de Reynosa (Siamar), el edificio sede en la calle Saltillo en la colonia Longoria luce completamente diferente.
El espacio que alguna vez tuvo aceras, ahora se alzan altas bardas que "amurallan" el edificio y asumen un control de quien o quienes acceden.
Los cajones de estacionamiento frente al edificio, fueron suprimidos y ahora solo se visualizan altas bardas de cemento y block.
El conflicto aún persiste, pues mientras se ventila en tribunales los alegatos de la representación oficial del Siamar, los días y semanas avanzan sin aparente solución a este conflicto.