La Tarde / Staff
Enorme brote de aguas negras agobia a familias de las calles Francisco J. Múgica y San Juan de Letrán por lo que temen surjan enfermedades por el gran foco de infección en que está convertido el problema.
Los fétidos olores que emanan de las viscosas y verdosas aguas residuales, mantienen preocupados desde hace un mes y permanentemente a quienes viven a tan sólo unos pasos del lugar donde afloran constantemente tanto de día como de noche en la colonia Renacimiento.
El agua pestilente recorre por lo menos cuatro cuadras a lo largo de la Francisco J. Múgica por lo que estiman que sean por lo menos unas 30 o más familias las afectadas, que aseguran haber reportado la fuga pero que hasta el día de ayer no había sido solucionada.
Según uno de los perjudicados, el problema se generó a raíz de que una cuadrilla de la COMAPA (Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado) realizaron labores de desazolve en una de las alcantarillas pero a los pocos días, empezó a brotar gran cantidad de agua mal oliente.
Sin embargo, quienes supuestamente causaron el problema, ya no regresaron a darle solución adecuada por lo que las aguas residuales cada vez afloran en mayor cantidad ocasionando con ello que cada vez sean más las gentes que temen una epidemia de males de la piel, entre otras más.