El robo hormiga representa para el comercio establecido de Reynosa una pérdida anual de alrededor de 150 millones de pesos, problema que se presenta desde hace muchos años y que no ha sido posible erradicar.
"Lo que generalmente sustraen algunos sujetos que entran a tal o cual negocio para adquirir productos varios, son chocolates, pasta de dientes, cajetillas de cigarros, jabones, entre otras cosas más", dijo Gildardo López Hinojosa, presidente de la Canaco Servytur.
Ahora bien, si hablamos de los días que duró el Buen Fin que apenas terminó, las pérdidas por ese concepto podrían haber ascendido a unos 380 mil pesos en tan sólo cuatro días.
La recomendación que se hace a los comercios para ir disminuyendo ese tipo de problemática, es contratar más personal que se encargue de estar al tanto de lo que sucede en el interior de los establecimientos, pero al final de cuentas, hay quienes mejor se resignan a perder ese dinero por robo hormiga porque también incrementar el número de empleados también equivale a gastos adicionales y hay ocasiones en que esa medida no resulta muy conveniente.
Por lo tanto, hay los que prefieren aceptar esa clase de mermas en los ingresos económicos de los negocios, aunque pudiera ser que vaya disminuyendo un poco aún cuando se estima que el uno por ciento de las ventas es equiparable a la pérdida por ese tipo de hurto, apuntó finalmente López Hinojosa, presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en esta fronteriza ciudad.