Siguen los conteos de la población migrante que espera desde Reynosa asilo en Estados Unidos, ayer, en el segundo día, todavía se registró caos en la filas debido a que la comunidad intenta alcanzar los primeros lugares.
El ejercicio se desarrolla en los límites del Rio Bravo, justo en el albergue Senda de Vida, donde se evidencia la presencia de cientos de haitianos y centroamericanos, que llegan en cuenta propia o al pagar servicios de taxi. “A los que están contando ahorita son familias de tres, yo soy de dos, solo estoy aquí con mi hija desde hace 10 meses, nos vinimos caminando desde la Plaza de la República porque no tenemos dinero para el taxi, y el camión que mandaron se llenó muy rápido”, comentó Norma, migrante de El Salvador.
Para guardar un orden, la fila se divide con lazos, y por grupos se pasan a los registros. “Solo familias de tres personas que tengan más de cinco meses en Reynosa, vamos a contarlos a todos, pero deben esperar su turno”, explica personal del albergue.
Se trata de aquellos migrantes que no alcanzaron cupo en una casa de asistencia, y que pernoctan en la Plaza de la República, o que por cuenta propia, han rentado casas.
El último conteo extraoficial del albergue, indica que en Reynosa existen entre 9 mil y 10 mil personas esperando asilo en Estados Unidos, siendo mayoría la población de Centroamérica y Sudamérica, aunque en los últimos meses, los de Haiti también han destacado.
Héctor Silva de Luna, el director, reitero que los conteos son exclusivamente para llevar un control de cuántos y bajo qué circunstancias esperan, sin una garantía de cumplir el “sueño americano”. “Nosotros como albergue solo somos un vínculo con las autoridades y los abogados, no quiere decir que al anotarlos van a cruzar, eso es erróneo, quienes deciden cuándo están en Estados Unidos, ellos deben analizar cada caso en particular, sabemos que hay familias, por eso se decidió iniciar con ellos”.
Él junto con su personal de apoyo, calman a los migrantes que desesperados por un lugar, llegan a generar situaciones de caos.
Desde que inició la pandemia por Covid-19, Reynosa se ha convertido en un epicentro de migrantes, registrando arribo de africanos, bielorrusos y ucranianos.
Se espera que este jueves el censo pueda avanzar, para contabilizar a las familias de dos integrantes, y posteriormente con los que vienen solos.