El más reciente caso ocurre en la avenida Miguel Alemán de la colonia Narciso Mendoza, en donde la gente que vive a unos pasos de la alcantarilla le colocó en su interior un madero largo a efecto de advertir a los conductores del problema que representa.
Rufino Landeros, uno de los vecinos del lugar llamó a las autoridades correspondientes para que se den a la tarea de atender la problemática que ya tiene varias semanas.
Anteriormente, le colocaban a la alcantarilla neumáticos de diferentes tamaños, pero ahora los que están inconformes con esa anómala situación están utilizando un barrote de por lo menos un metro y medio o dos de largo para que los vehículos no caigan en el hoyando y con ello puedan perjudicar sus automotores.
En otros puntos de la ciudad, también se pueden apreciar situaciones similares como sucede en el bulevar Puerta Grande.
Por su parte, en la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado dicen que personas desconocidas se dan a la tarea de quitar las tapas, sobre todo cuando llueve, para que el agua entre a las alcantarillas, pero éstas que ya no aparecen.