La Tarde / Staff
“La noticia te llega como una cubeta de agua fría, tu hijo tiene autismo, por supuesto que lloras, reclamas, tienes miedo, pero después todo pasa, comienzas a ver lo bello, el lado extraordinario del reto”, son las palabras de Rosalía Guadalupe Garza Hernández, madre de dos niños diagnosticados con autismo, en el marco del Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, conmemorado este sábado.
De acuerdo a la explicación médica, el autismo es un trastorno que se caracteriza por la intensa concentración de una persona en su propio mundo interior, que de manera progresiva pierde contacto con la realidad exterior.
En el día para hacer conciencia y evidenciar que el diagnostico es cada vez más común dentro de las familias, los pendientes, carencias y necesidades en Reynosa sobresalen, e inician con la falta de especialistas.
Por ello es que las madres y padres con hijos diagnosticados han creado comunidades a través de las redes sociales para apoyarse, Rosalía es una de ellas.
“Hace ocho años recibí el diagnostico con mi hijo Pedro que ahora ya tiene 12 años, luego fue el de mi otro hijo Pablo que tiene 11, es difícil porque los doctores ni siquiera sabían que pasaba, neurólogos, psicólogos, es una situación muy dolorosa, ahorita ya con el avance de las tecnologías pudimos crear estas comunidades, no solo yo, muchos padres donde hablamos de nuestra experiencia, lo que nos ha funcionado y el cómo tomar las cosas, me han llegado mensajes desde el otro lado del mundo”.
La Tarde solicitó al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) estadísticas acerca de cómo impacta este diagnóstico en las familias actuales, pero el equipo afirmó que todavía no hay datos.
Las estimaciones de Rosalía y otros padres, van enfocados a que a uno de cada 47 niños enfrenta autismo, en contraste a lo que ocurría hace tres años cuando la cifra era uno por cada 55.
“A los padres que están atravesando por esto, que ya vieron algo diferente en sus hijos como lo hice yo cuando eran bebés, desde el aleteo, balanceo de un lado a otro, problemas para hablar, lo mejor es decirles que no están solos, saldrán adelante, será difícil pero si se puede, muchos dejamos de trabajar por cuidar a los hijos, desde mi experiencia ha sido lo mejor, porque ahora Pedro habla inglés, escribe, y Pablo que tenía autismo severo ya es moderado”, y agregó; “Los doctores pueden ser muy crueles al decir que toda la vida el autista dependerá de nosotros, que nunca será independiente, nunca hablará, no tendrá una vida normal, por eso este día de concienciación es importante hacer cambios, en todos los aspectos, porque también hay rechazo en las escuelas, en la sociedad en general”.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) habla del autismo como parte de un grupo de afecciones diversas que pueden detectarse desde la infancia, clasificadas como TEA.
El organismo reconoce que uno de cada 160 menores en el mundo enfrenta el diagnostico, y que muchos de ellos sufren estigmatización, discriminación y violaciones a los derechos humanos.
La inclusividad, mayor accesibilidad, condiciones médicas, educativas, de salud y de convivencia son algunos de los objetivos de los padres, que desde Reynosa se impulsan.