"Cableado, así como los medidores fueron hurtados por personas ajenas a este lugar hace ya varios años, por lo que se procedió a la instalación de portones en las diferentes entradas, así como forma de brindar protección a los locales que, de todas maneras, cada uno de ellos cuenta con su respectiva cortina metálica", dijo Karen Ibarra, presidenta del propio RTC.
Precisamente, a través de un oficio entregado en la dirección de Inspección y Vigilancia, se está haciendo la solicitud correspondiente para ver si es posible reanudar el servicio de energía eléctrica a los locales de los comerciantes que operan ahí.
Los locatarios confían en obtener una buena respuesta, por considerar que la luz siempre es necesaria.
Lo mismo para reiniciar el alumbrado público en lámparas, cuyo cableado fue dañado por algunos camioneros que acostumbraban estacionar sus pesadas unidades en el estacionamiento asignado al tianguis, lo mismo que otros postes que también se vieron dañados por la caída de una barda trasera de una escuela primaria, situada a un lado del propio conglomerado de locales comerciales.