Luego de que el Puente Internacional Reynosa-Pharr permaneciera cerrado debido a las condiciones meteorológicas, la reapertura de ayer provocó largas filas de transportistas quienes pretendían llegar a Estados Unidos con diversas cargas.
Las unidades suelen llevar alimentos, materias primas, de construcción y especializados provenientes de diversas partes del país, aunque principalmente se concentran en la zona centro y sur.
De acuerdo a la Asociación de Transportistas de Reynosa, por esta vía transitan un promedio de 2 mil 500 unidades al día.
Por lo que ayer, el flujo fue equivalente a 2 días, formando filas que llegaron hasta el libramiento a Río Bravo, y que de forma momentánea ocuparon uno de los carriles laterales, aunque la circulación fue rápida.
El cierre del Puente Reynosa-Pharr obedece a la formación de cristales en los bordos de la carretera debido a la caída de aguanieve y nieve que registró esta frontera.
Se trata de una decisión histórica que formó parte de un operativo de prevención de accidentes y que abarcó otras arterias como la autopista Reynosa-Matamoros, Reynosa-Monterrey, así como los puentes vehiculares de las principales avenidas.