Ayer inició el traslado de migrantes que permanecen varados en la Plaza de la República de Reynosa, hacía el albergue “Senda de Vida”, en donde recibirán alimento, hospedaje y atención médica de forma gratuita.
El titular del recinto Héctor Silva, explicó que se espera llevar al menos a 300 personas, de las más de mil que están ahí, desde niñas, niños adolescentes y padres de familia.
“Lo que está ocurriendo es algo muy importante para nosotros porque se les dará un trato más digno a estas personas, que como todos son seres humanos y tienen derechos, en el albergue se les dará comida, hospedaje, un lugar seguro para esperar a su trámite migratorio”.
El traslado se hará de forma paulatina en grupos de aproximadamente 30 y 40 personas a través de autobús, pero, para subir, es necesario presentar una prueba negativa a Covid-19.
“Quisiéramos que todos llegaran al albergue pero no es así, tenemos que ir poco a poco, con la prueba en mano negativa, incluyendo a los niños, cuando lleguen se pondrán en aislamiento por un lapso de 40 días para detectar síntomas probables, no podemos arriesgar ni hacer un foco de contagio”, agregó Silva.
Su estadía en el albergue permanecerá monitoreada en un espacio al aire libre, donde los migrantes colocaran sus casas de campaña, recibirán alimento tres veces al día, seguimiento médico y asesoría sobre sus trámites migratorios.
La mayoría de los migrantes varados en la Plaza de la República son de origen centroamericano. “Hablamos de Guatemaltecos, Salvadoreños, Hondureños, personas de Centroamérica que vienen buscando el sueño americano, algunos cruzaron de forma ilegal y fueron deportados, pero otros llegaron para hacer el trámite desde cero, entonces se debe revisar cada situación en concreto”.
EL PANORAMA
Mientras el traslado comenzaba, los que aún permanecen en la Plaza de la República hacían fila por un plato de comida, pasaban la tarde buscando la sombra de los árboles para soportar las altas temperaturas que registra Reynosa.
Los más pequeños se refugiaban entre plásticos y cartones de las jardineras y otros, desde arriba del quiosco principal hacían llamados a las autoridades buscando agilizar su trámite migratorio.
“Todos queremos ir a un albergue y necesitamos irnos ya hacía Estados Unidos, nadie está aquí por gusto, tenemos la necesidad de salir buscando una mejor calidad de vida”, se escuchaba.