En el marco del Día Internacional de la Mujer, la conferencista y escritora mexicana Adriana Macías, se ha convertido en un referente del esfuerzo y constancia femenina.
Nacer sin brazos, no ha sido un obstáculo para ella, por el contrario la ha hecho destacar en diversos ámbitos, incluyendo el personal, al ser madre soltera.
En entrevista exclusiva para La Tarde comentó que cualquier mujer tiene las herramientas suficientes y necesarias para sobresalir, sin importar el ámbito.
“Este día es especial para que despertemos esa confianza y valentía, sabemos que muchas veces como mujeres nos da miedo salir de nuestra zona de confort, tomar una decisión por desconfianza de lo que podemos lograr, decimos es que si renuncio, si me separo, no voy a poder, y lo mejor es confiar en nosotras, incluso aunque no tengamos la certeza, hay que expresarnos, abrirnos las puertas”.
La discapacidad que enfrenta la describe como un maestro que todos los días le enseña cosas nuevas, a través de sus redes sociales, Adriana se caracteriza por mostrar sus actividades al día, desde cocinar, pasear, maquillarse y también, muestra la parte de ser madre, así como la de profesional.
El poder femenino, es un impulso constantemente, e incluso con este lema inició diversas entrevistas para motivar aún más al género.
“Como mujer el reto para mi ha sido doble, porque nos gusta la perfección, siempre buscamos el cómo vernos mejor y es complicado, en mi caso no hay botox ni faja para disimular que no tengo brazos, ese ha sido uno de los retos más grandes en mi vida, trabajar el autoestima”, y agregó; “Muchas veces me sentí menos mujer por no tener brazos, lo que me llevó a tomar decisiones desde el miedo, espero que esta experiencia que yo ya vivi, pueda ayudar a construir decisiones con paz, con alegría, desde el corazón.”
Ante la pregunta de qué significa para ella ser mujer, respondió: “Ser mujer es increíble, que bueno que somos mujeres, tenemos la oportunidad de transformar, de mejorar, de educar desde el ejemplo, es un gran compromiso, una gran responsabilidad y misión, podemos educar a nuestros hijos, de orientarlos, que emoción, que podemos transformar al mundo, es un honor ser mujer”.