Las recientes lluvias en Reynosa han llevado a animales nativos, como armadillos y zarigüeyas, a salir de sus madrigueras, incrementando el riesgo de atropellos en las carreteras locales.
Estos animales, que normalmente permanecen ocultos durante períodos secos, han comenzado a ser avistados con más frecuencia cerca de áreas urbanas y carreteras. Autoridades locales y expertos en conservación ambiental advierten a los automovilistas sobre la importancia de conducir con precaución, especialmente durante la noche y en zonas rurales, donde estos animales suelen cruzar.
El aumento en el desplazamiento de estos mamíferos se debe a la búsqueda de alimentos y condiciones más favorables después de las lluvias. Por lo tanto, se insta a la comunidad a estar atenta y respetar los límites de velocidad para reducir el riesgo de colisiones con la fauna local.
Esta temporada de lluvias ofrece una oportunidad para concientizar sobre la necesidad de proteger y preservar el entorno natural, asegurando la seguridad tanto de los animales como de los residentes locales.