Más de 100 amparos promovidos por carretoneros de esta ciudad fronteriza están a la espera de recibir un veredicto por parte de tribunales, que de ser favorable, frenaría los operativos que el ayuntamiento puso en marcha en contra de quienes utilicen animales para la recolección de basura.
Aunque por el momento el trámite no ha recibido alguna actualización, desde el pasado 1 de octubre cuando arrancó, confían en que pronto puedan regresar usando caballos o burros.
“Tenemos miedo de salir a las calles y que nos decomisen el carretón, las autoridades necesitan entender que esta es nuestra única forma de vida, nosotros solo nos dedicamos a esto, somos personas de bien, de aquí obtenemos recursos para mantener a nuestras familias, por eso seguimos esperanzados”. Mencionó Julio Hernández, un carretonero adscrito al Basurero de las Anacuas.
Entere sus peticiones también se incluye una prórroga para que el modelo motorizado, que los obliga a comprar un vehículo, se postergue hasta finales de enero del 2020.
De esto último, la Alcaldesa Maki Esther Ortiz Domínguez ha sido firme ante su postura de que no habrá negociación o discurso válido para ceder.
AÚN SE VEN CABALLOS
Pese a que en diversas ocasiones los titulares de Medio Ambiente y Protección Animal ante cabildo han recordado que no habrá tolerancia para ninguno que utilice caballos o burros jalando los contenedores de basura, en estos últimos días ha sido visible el tránsito de carretoneros tradicionales sobre diversas colonias, principalmente en La Ribereña, Aquiles Serdan, Zona Centro, Altavista, Ampliación Longoria, Rancho Grande, Ferrocarril, entre otras.