La Tarde / Staff
De acuerdo a la leyenda, colocar una cruz adornada de flores, nace cuando una parte de la Cruz de Jesucristo quedó enterrada y pobladores, albañiles y constructores, edificaron iglesias y esa tradición llegó a México como un acto para pedir protección para los que se dedican a esta labor.
Sindicatos de albañiles que forman parte de la Federación de Trabajadores de Reynosa disfrutaron del festejo, discada, frijoles charros y refrescos.
Ayer se les dio el medio día a los trabajadores del ramo y la mayoría festejaron con comida y un rato agradable.
"Como todos los años se celebra en cada una de las obras, en algunas obras que el patrón consiente este día, que sepan que son reconocidos como parte fundamental del progreso de Reynosa, porque realmente no hay vivienda si no están trabajadores de la construcción, no hay naves industriales si no es llevado acabo por los mismos trabajadores, entonces es una parte de reconocerlos lo que ellos aportan", dijo Salvador Portillo Martinez, secretario de organización de la Federación de Trabajadores de Reynosa.
La Santa Cruz es un símbolo para los albañiles, es protección en su trabajo, ya que algunas veces pueden caer o lastimarse mientras realizan su labor.
Una vez al año los albañiles disfrutan su día, en un ambiente relajado, sin preocuparse por poner el ladrillo o que quede bien el cimiento de una casa.