El número de migrantes que ha tomado la Plaza de la República en Reynosa como un hogar temporal ha ascendido a mil 200, incluyendo mujeres, hombres, niñas, niños y adolescentes.
La mayoría son provenientes de centroamérica, deportados de Estados Unidos tras un cruce ilegal.
Su permanencia se evidencia en varias decenas de casas de campaña, que obstaculizan las áreas verdes, la plazoleta, quiosco y pasillos, en estos últimos lugares, hay además cartones y plásticos con los que se protegen de las condiciones meteorológicas.
El campamento fue creado a finales de marzo de este año, luego de que elementos de la Guardia Nacional, desalojarán a un grupo de alrededor de 200 migrantes que se encontraban en las inmediaciones del Puente Internacional Reynosa-Hidalgo, pero los número fueron creciendo rápidamente hasta sumar los más de mil 200 actuales.
Las autoridades han reconocido que su estadía ha rebasado las capacidades de atención, al igual que la de los albergues, en donde solo se trabaja al 50 por ciento de capacidad.
Por ello todos los días los se observan grupos de asociaciones civiles entregando alimentos y ropa, articulo de aseo personal e incluso elementos para prevenir el Covid-19. “Todos los días vemos rostros nuevos, las personas llegan buscando el sueño americano y es muy triste esta situación, niñas, niños con hambre, lo que hacemos es traerles comida, ofrecerles unas palabras de aliento y hace oraciones para que todo mejore”, mencionó Daniela, voluntaria de una asociación de alimentos.
Para asearse, los migrantes buscan agua entre los jardines, y se apoyan de baños públicos que fueron proporcionados también por asociaciones.
Con la pandemia del Covid-19 estos grupos se consideran de alto riesgo, por lo que también personal ajeno a organismos gubernamentales realizan pruebas.