Aunque no es médico ni paramédico, es una heroína sin capa.
Amalia Ramos, es trabajadora de limpieza que pese a la pandemia se ha mantenido trabajando, sacando la basura de las calles del primero cuadro de la ciudad.
Teme contagiarse y piensa en su familia, pero su trabajo es indispensable para mantener la ciudad sin basura.
Hace llamado a las familias a que sigan quedarse en casa además de que ha ayudado a que no se registre tanta basura como antes.