En la calle Moscú de la colonia Cañada, la escuela "Don Heriberto Deándar Amador" se encuentra como un faro de inclusión y diversidad educativa.
Desde su fundación en los años 80, esta institución ha sido un referente para la comunidad con un turno vespertino, donde todos los estudiantes son bienvenidos sin importar sus necesidades particulares.
En entrevista, el director Efrén Alexánder Mass Pérez compartió su visión sobre la educación inclusiva que se imparte en la escuela.
"Brindamos todos los servicios necesarios, incluyendo el programa USAER, que apoya a los alumnos con necesidades educativas especiales", expresó.
Dicho programa ha sido parte de nuestra misión desde hace varios años, comentó Mass Pérez, quien ha estado al frente de la dirección durante los últimos ocho años.
La inclusión es el pilar fundamental de esta escuela, "Aquí tenemos alumnos regulares y otros que enfrentan barreras para el aprendizaje, como algunas condiciones físicas.
Aunque no somos un Centro de Atención Múltiple, adaptamos nuestras instalaciones y recursos para atender a cada estudiante", enfatizó el director, quien agregó que la adaptación no sólo se limita al entorno físico, sino que también se extiende a los métodos de enseñanza.
Un ejemplo claro de esta práctica inclusiva se encuentra en el primer grado, donde se han integrado recientemente tres alumnos con autismo.
"Las maestras están trabajando para canalizarlos adecuadamente y brindarles la atención que necesitan", detalló Mass Pérez.
La colaboración de las familias es esencial en este proceso. Las "maestras sombra", que son madres de familia, juegan un papel crucial al acompañar a sus hijos durante las clases. Este apoyo adicional no sólo beneficia a los alumnos con autismo, sino que también enriquece el entorno educativo general.
La escuela acoge a niños con diferentes tipos de necesidades educativas especiales, desde autismo hasta debilidad visual. "Contamos con alumnos en segundo y quinto grado que requieren atención especializada.
Nuestro objetivo es integrarlos plenamente con sus compañeros, promoviendo valores como la solidaridad y la empatía", subrayó Mass Pérez.
Las aulas de la escuela "Don Heriberto Deándar Amador" no sólo son espacios de aprendizaje, sino también de convivencia y desarrollo personal.
Los alumnos con barreras para el aprendizaje participan activamente en las actividades gracias al trabajo conjunto de las maestras de USAER y los docentes titulares, quienes adaptan los materiales y estrategias de enseñanza.
Con el reciente inicio del ciclo escolar, la escuela aún tiene cupo disponible en todos los grados "Contamos con instalaciones seguras y amplias, incluyendo una cancha, áreas verdes y una biblioteca completa", aseguró el director.
La seguridad de los estudiantes es prioritaria, respaldada por una barda perimetral que refuerza un ambiente seguro para los estudiantes.
Mass Pérez invitó a los padres de familia interesados en una educación inclusiva a acercarse a la escuela. "Las puertas están abiertas para aquellos que buscan un lugar donde sus hijos puedan aprender y crecer en un ambiente respetuoso y solidario", concluyó.
CUMPLEN APOYO A LA EDUCACIÓN REGULAR
* Como lo establece el artículo 41 de la Ley General de Educación, se apoya la inclusión de alumnos que enfrentan barreras para el aprendizaje y su participación en escuelas de educación básica.
* Se enfoca en la atención de estudiantes con necesidades educativas especiales o alguna discapacidad mediante la orientación a maestros y padres de familia.
* Proporciona los apoyos indispensables dentro de un marco de equidad, pertenencia y calidad para desarrollar sus capacidades al máximo.
* Además, se busca la integración de los alumnos a su educación, en su vida social e, incluso, para su futuro laboral.
¿A QUIÉNES ATIENDEN?
A estudiantes con
* Discapacidad auditiva
* Discapacidad Intelectual
* Discapacidad Motora
* Discapacidad Visual
* Autismo
* Aptitudes sobresalientes
* Discapacidad múltiple