Hubo personas que lograron su propósito de entrar al panteón municipal Sagrado Corazón de Jesús aprovechando los huecos que había en una parte de la cerca trasera y burlando la vigilancia que realizaban empleados del sitio.
Un hombre del que dijeron se había brincado la barda de block que hay en la parte lateral junto al parque de béisbol Adolfo López Mateos, pasó tranquilamente a dejar flores a una de las tumbas.
Por otro lado, un par de mujeres fueron vistas también en el interior del lugar y reconocieron que habían cometido un error al entrar ahí pero argumentaron que lo habían hecho porque andaban buscando a un marmolero que trabaja precisamente en el camposanto a quien le habían encargado un trabajo para una sepultura donde yace el cuerpo de uno de sus familiares.
También se dieron casos en que vecinos cuyos patios comunican directamente con el cementerio, que permitían la entrada al lugar y para ello tan sólo les pedían ‘para las cocas’.
Una persona que prefirió no identificarse, comentó que efectivamente ese tipo de abusos se venían presentando hasta ayer lunes, precisamente el Día de los Fieles Difuntos.
Es por el callejón Panteones donde están ubicadas varias viviendas y en donde se venían presentando las referidas anomalías.
Personal del Sagrado Corazón de Jesús realiza rondines a lo largo de la cerca para evitar que el internamiento de personas continue registrándose y uno de los tramos fue ‘cerrado’ con palos y ramas.
La única puerta que hay en el cementerio permanece cerrada y se abre solamente cuando sepultan un cadáver.