Habitantes de la zona rural de Reynosa también se vieron alcanzados hace ocho días por las fuertes ráfagas de viento y constante lluvia que arrojó el huracán Hanna, provocando innumerables perdidas materiales en las viviendas.
A transcurrido más de una semana del impacto del fenómeno natural en está frontera y las miles de personas afectadas todavía no se han recuperado, incluyendo los residentes de los poblados que están alrededor de los tres ejidos (Reynosa Díaz, Santo Niño y Santa Herminia) reconocidos por el Catorceavo Comité Campesino de Reynosa.
Hilario Barrera Martínez, presidente de la dependencia, comentó que se presentaron mínimas afectaciones en los ejidos que se encuentran en dirección a la carretera Ribereña, pero donde le presentaron reporte de inundaciones fue en los poblados Arguelles, Los Altos, Carrizales, Reynosa Díaz, El Faro y El Barranco.
Lo que corresponde a los 70 ejidos que se localizan en la zona sur de Reynosa, rumbo al municipio de San Fernando, no presentaron mayores problemas en sus respectivas cosechas solamente revelaron el percance que algunos caminos fueron cubiertos por la corriente del agua como la brecha El Becerro que fue la única dañada por las recientes lluvias.
Barrera Martínez, representante de los campesinos, dio a conocer que tienen registrados alrededor de 5 mil 500 trabajadores del campo en el comité, pero el número varia tras emigrar a laborar a otros lugares, aunque por el momento no cuenta con un cálculo de cuanto va ascender económicamente los daños en las respectivas propiedades.
Los artículos que perdieron las personas son aparatos electrodomésticos, colchones, camas, alimentos, roperos, muebles, automóviles, entre otras cosas. El pasado jueves residentes de los ejidos sostuvieron trabajos de emergencia en conjunto con autoridades estatales para desaguar la gran cantidad de agua ocupando cinco bombas de agua que tenían la capacidad de retirar 120 litros.