La madre naturaleza es tan sabia que nos ofrece verduras y frutas de acuerdo a las necesidades nutrimentales que tenemos en cada temporada.
El otoño es seco y la temperatura comienza a bajar, lo que favorece la aparición de enfermedades infecciosas y alergias. Así, los vegetales de la temporada se caracterizan por ser ricos en antioxidantes, provitamina A y vitamina C, nutrimentos que pueden ayudar a reforzar el sistema inmunológico.
El dato: durante el mes de noviembre, sobresale la temporada de berenjena, acelga y calabaza de Castilla. Verduras muy versátiles y con importantes cualidades nutrimentales. Otras verduras disponibles durante la temporada: betabel, calabacita, col, ejote, espinaca, jitomate, pepino, tomate y zanahoria.
Acelga. Se trata de una verdura muy baja en calorías: 2 tazas aportan solamente 22 kilocalorías. Tiene un alto contenido en fibra que favorece el tránsito intestinal y previene el estreñimiento, además de vitamina A, C, K, potasio y yodo, nutrimento muy importante para la producción de hormonas tiroideas.
Berenjena. Verdura de sabor ligero con un toque amargo. Si bien sus cualidades nutrimentales son inferiores en relación a otros vegetales, es muy versátil. La cáscara de la berenjena contiene un antioxidante llamado antocianina con propiedades protectoras del sistema cardiovascular. Una taza de berenjena cocida aporta solo 35 kilocalorías por lo que resulta una buena opción en dietas de adelgazamiento.
Calabaza de castilla. Es uno de los alimentos indispensables en los altares de muertos. De acuerdo al Sistema Mexicano de Alimentos equivalentes, una taza de calabaza cocida aporta solo 44 kilocalorías. Destaca por ser muy rica en carotenoides como luteína y zeaxantina que favorecen la salud ocular y fortalecen el sistema inmunológico. También aporta una buena dosis de vitamina C y potasio.
5 razones para consumir verduras de temporada:
1. Sabor.
2. Nutrición.
3. Economía.
4. Respeto al medio ambiente.
5. Apoyo al consumo local.