¿Cómo gestionar la ansiedad al empezar un nuevo trabajo?

Estrategias eficaces para gestionar el exceso de ansiedad al empezar en un puesto de trabajo

Buenas noticias: ¡Has conseguido el trabajo que tanto esperabas! Malas noticias: ¡la ansiedad ha llegado para intentar opacar este gran logro!

Empezar un nuevo trabajo implica un sinfín de sensaciones, y la ansiedad puede ser una de ellas. Por esta razón a continuación daremos un breve repaso a las claves para gestionar la ansiedad al empezar un trabajo nuevo, para que puedas convertir este nuevo desafío en una experiencia gratificante.


¿QUÉ ES LA ANSIEDAD LABORAL?

La ansiedad laboral es una respuesta física, emocional y conductual que surge de nuestras preocupaciones sobre el trabajo y su impacto en nuestro futuro. Y, no, ¡no te ocurre solo a ti! Aunque no se sienta muy bien, es normal que experimentemos ansiedad en el trabajo, ya que nos permite anticiparnos a los posibles peligros y tomar decisiones adecuadas en el presente. La ansiedad laboral puede considerarse dentro de los trastornos de ansiedad identificados por el DSM-V.

Especialmente cuando hablamos de empezar un nuevo trabajo, la ansiedad a menudo toma el escenario principal en esta transición. Es completamente normal sentir una mezcla de emoción y nervios al adentrarte en un entorno nuevo, repleto de caras y responsabilidades desconocidas. La incertidumbre por el nuevo reto y la presión por causar una buena impresión pueden pesar fuertemente en tu mente, lo que podría generar sentimientos de duda y preocupación sobre ti mismo.

Al igual que el estrés, la ansiedad es una respuesta natural y adaptativa. Algunos lo ven como parte de nuestra respuesta instintiva de lucha o huida, desencadenada por el estrés. Sin embargo, en el ámbito laboral, es común que algunas personas sientan ansiedad frente a situaciones que no representan una verdadera amenaza. Estos sentimientos difusos de peligro pueden afectar nuestra día a día en el trabajo, y dificultar así nuestra capacidad para identificar la causa de nuestros temores.

La ansiedad laboral es una experiencia común y comprender sus manifestaciones es el primer paso para hacerle frente. Acepta esta oportunidad de crecimiento y aprendizaje, recuerda que es completamente esperado que sientas ansiedad al principio. Da pasos pequeños, sé amable contigo y cree en tus habilidades para adaptarte y prosperar en este nuevo capítulo de tu trayectoria profesional.


SÍNTOMAS DE LA ANSIEDAD LABORAL

Reconocer las señales de la ansiedad es clave para poder manejarla y disfrutar al máximo de esta nueva etapa. El detalle es: ¿cómo puedes saber si la ansiedad te está jugando una mala pasada? Te daremos algunas señales:

Sientes un nudo en el estómago que no te deja respirar.

Tu mente no para de darle vueltas a todo tipo de escenarios negativos.

Te sudan las manos y te tiembla la voz cuando hablas con tus compañeros.

Duermes mal por la noche y te sientes cansado durante el día.

Tienes miedo de cometer errores y que te juzguen.

También es importante mencionar que, a menudo, manifestamos malestar a través de síntomas físicos y dolores corporales sin explicación. Esta situación es frecuente en personas que tienen trastorno de ansiedad generalizada (TAG). En el entorno laboral, esto puede manifestarse mediante dolores de cabeza y cuello, sudoración excesiva en las manos o sensación de asfixia.

Además de las molestias físicas, se suman conductas como evadir responsabilidades, postergar tareas complejas o tener bloqueos mentales durante la jornada. En casos extremos, la ansiedad puede derivar en ataques de pánico o crisis emocionales.

En la próxima sección te compartiremos algunos consejos prácticos para que puedas gestionar la ansiedad y comenzar tu nuevo trabajo con la mejor actitud y la mente tranquila.


ESTRATEGIAS PARA GESTIONAR LA ANSIEDAD EN EL TRABAJO

En un entorno laboral nuevo es común experimentar ansiedad debido a la falta de familiaridad y la presión por desempeñarse bien. Sin embargo, existen estrategias efectivas para gestionar la ansiedad en el trabajo y mantener un equilibrio emocional:


1. PRIORIZA EL PROCESO DE APRENDIZAJE

No te compares con los demás, al principio debes tener en cuenta que experimentarás cierta desventaja en términos de información y experiencia. Enfócate en el proceso de adaptación, define tus tareas iniciales y da tiempo a tu aprendizaje para evitar sentirte abrumado/a.


2. Escribe lo que te angustia

Plasmar en papel tus preocupaciones laborales te podría ayudar a visualizarlas de manera objetiva. Verás que muchos de los escenarios temidos son improbables, lo que te dará una sensación de control sobre tus pensamientos.


3. BUSCA ALIADOS EN EL TRABAJO

No dudes en recurrir a tus compañeros y jefes para aclarar dudas y recibir apoyo. Contar con un ambiente laboral colaborativo y comprensivo facilitará tu adaptación y disminuirá la ansiedad.


4. RECUERDA TUS VIRTUDES

Reflexiona sobre tus cualidades y logros que te llevaron a obtener tu nuevo trabajo. Recordar tus fortalezas te ayudará a mejorar tu autoconfianza y afrontar los desafíos laborales con mayor seguridad.


5. CULTIVA TU RELAJACIÓN

Practica técnicas de relajación como la respiración diafragmática o disfruta de infusiones relajantes para aliviar el estrés. Fuera del trabajo, dedica tiempo a actividades que te relajen, como bailar, hacer yoga o caminar.


6. ESTABLECE METAS REALISTAS

Define metas alcanzables de acuerdo a tu nivel de experiencia. Elaborar un cronograma con objetivos concretos te brindará una guía para tu desempeño laboral y evitará la sobrecarga de trabajo.


7. LLEVA UN ESTILO DE VIDA SALUDABLE

Cuidar tu cuerpo a través de una alimentación equilibrada, ejercicio regular y descanso adecuado es fundamental para mantener tu energía y reducir los niveles de estrés. Prioriza tu bienestar físico y emocional tanto durante como después de la jornada laboral.