Normalmente la maternidad es uno de los momentos más especiales y felices en la vida de cualquier pareja, pero en ocasiones se pueden producir todo tipo de problemáticas en el proceso, tanto a nivel físico como psicológico.
Estos problemas en la maternidad han sido durante muchas décadas ignorados u ocultados a nivel social; sin embargo, afectan de manera muy intensa a la vida y la salud mental de los padres a quienes afectan.
En el artículo de hoy nos centraremos en explicar qué es la terapia perinatal y cuándo debemos acudir a los servicios de un terapeuta especializado en psicología perinatal.
¿QUÉ ES LA TERAPIA PERINATAL?
La terapia perinatal es la especialidad de la psicología que se encarga de estudiar, prevenir e intervenir en cualquier alteración psicológica o problema emocional que pueda tener lugar en las etapas iniciales de la maternidad y la parentalidad (concepción, embarazo, parto o crianza de los primeros meses).
Además de brindar una intervención psicológica profesional, los terapeutas perinatales ofrecen un apoyo y un seguimiento ante cualquier problema o dificultad por el que puedan estar pasando las parejas que quieran tener un hijo.
Por otro lado, también ofrecen un servicio de atención, consejo y aporte de información de todo tipo, conocimientos, estrategias y pautas útiles tanto a los padres como a sus familiares.
En definitiva, la psicología perinatal tiene como objetivo atender cualquier tipo de problema, alteración o desequilibrio en la madre, la pareja o su familia y también atenderles en todo lo que puedan necesitar, de manera científica y profesional.
¿CUÁNDO SOLICITAR SERVICIOS DE TERAPIA PERINATAL?
Estos son los principales tipos de problemas y necesidades abordados desde la terapia perinatal.
1. DEPRESIÓN POSTPARTO
La depresión posparto es una de las principales consultas que pueden presentar las parejas y las madres que han dado a luz recientemente.
Se trata de una alteración psicológica caracterizada por un estado de tristeza, melancolía, llanto o cambios de humor producido poco después del parto, que afecta a muchas mujeres en todo el mundo y que debe ser tratado por un psicólogo profesional especializado.
Esta depresión también puede darse durante el embarazo y en cualquier caso debe ser tratada como un problema de salud psicológica totalmente normal que puede ser tratado perfectamente.
2. PROBLEMAS DE INFERTILIDAD
Otra de las situaciones en las que hay que asistir a terapia perinatal ocurre al sufrir el problema de la infertilidad. Esta es una de las consultas que acostumbran a tratar los profesionales de la psicología perinatal tanto en mujeres como en parejas que desean concebir.
Tanto la infertilidad como los problemas para concebir pueden ser originados por problemas psicológicos como es el estrés o la ansiedad y es en estos casos en los que un psicólogo perinatal puede ofrecer sus servicios para ayudar a la pareja a superar su problemática. Por otro lado, cuando el motivo de la infertilidad es médico, esto puede dañar a la autoestima y generar una crisis existencial al poner en duda los planes de uturo de vida en familia con hijos.
3. PROBLEMAS CON EL VÍNCULO CON EL BEBÉ
Puesto que no todas las madres tienen la misma facilidad para establecer el vínculo emocional con el bebé, en ocasiones también es necesario o el apoyo de un profesional de la psicología perinatal para lograrlo.
Después del parto pueden ser muchos los motivos que hacen que una madre no logre establecer el vínculo normal con su bebé o simplemente cree que no será capaz de hacerlo. La atención profesional psicológica nos brindará los conocimientos y las pautas de conducta específicas necesarias para establecer un vínculo natural con nuestro hijo.
4. SECUELAS PSICOLÓGICAS POR UN ABORTO INVOLUNTARIO
La pérdida de un bebé o los abortos son experiencias muy dolorosas en la vida de cualquier padre, que a menudo también deben ser tratadas por profesionales cualificados expertos en psicología perinatal. Muchas veces es un tipo de duelo que resulta complicado de afrontar precisamente porque se siente una conexión emocional difusa con el hijo que no llegó a nacer, como si su identidad fuese borrosa.
En estos casos es importante el apoyo y el seguimiento que reciben las parejas tanto por parte de su terapeuta como de sus amigos y familiares.
5. TRASTORNO DE ESTRÉS POSTRAUMÁTICO TRAS EL PARTO
El desarrollo de un trastorno de estrés postraumático puede ocurrir tras el nacimiento de un bebé, especialmente si el parto ha sido accidentado o el embarazo ha pasado por muchos obstáculos e imprevistos.
Los trastornos de estrés postraumático perinatales pueden ser tratados en consulta, al igual que cualquier otro trastorno análogo generado en otro contexto.
6. DIFICULTADES CON LA LACTANCIA
Las dificultades en la lactancia pueden nuevamente tener orígenes tanto físicos como psicológicos que deben estudiarse y analizarse pormenorizadamente por el terapeuta.
Una correcta terapia psicológica perinatal puede ayudar a las mujeres que han sido madres recientemente a superar sus problemas de lactancia.
7. TRASTORNO OBSESIVO-COMPULSIVO
Algunos trastornos de tipo obsesivo-compulsivo pueden desarrollarse durante el embarazo o bien después del parto; la madre se obsesiona en un inicio por realizar comportamientos que asocia a una mayor probabilidad de que el bebé se desarrolle sano y sin problemas, pero esto deriva en una serie de rutinas repetitivas que, en caso de no ser hechas constantemente, generan malestar. Estas pueden afectar de manera muy intensa a la salud mental de la madre que lo padece.
8. ANSIEDAD Y MIEDO AL PARTO
El miedo al parto también es habitual en madres y padres que vayan a tener su primer hijo, así como el desarrollo de otras fobias específicas relacionadas con la maternidad.
Los síntomas y trastornos relacionados con la ansiedad también pueden darse en una pareja con problemas perinatales, así como durante el embarazo y tras el parto.
La ansiedad suele afectar a las madres primerizas que se encuentran perdidas y sin saber muy bien qué hacer en cada etapa de la maternidad.
La terapia psicológica perinatal es la mejor herramienta para ayudar a los padres y las madres a superar cualquier tipo de miedo que les aceche.