En esta ocasión, fueron menos las personas que visitaron los panteones con motivo del Día de los Fieles Difuntos en comparación con el año 2019 y una de las causas del fenómeno, podría ser la pandemia del Covid-19.
“De acuerdo con cifras aproximadas, esta vez serían algo así como entre nueve y 11 mil quienes acudieron a recordar a sus familiares y amistades que partieron al más allá al pié de sus tumbas”, dijo Juan José Carcaño Gutiérrez, director de Servicios de Emergencias en Protección Civil y Bomberos a nivel local.
Hasta donde se sabe, podría ser que varios se abstuvieron de asistir a los cementerios porque aún está vigente la emergencia sanitaria y otros, residentes de ciudades vecinas o del Valle de Texas tal vez no se enteraron de que sí estarían abiertos los camposantos durante las festividades del Día de Muertos.
Lo cierto es que no se miró tanta gente como en 2019 o años atrás en los que no había llegado todavía la pandemia generada por el Covid-19.
Aseguró que en los cementerios se les pidió a las personas que entraran portando el cubre bocas así como se aplicó gel en manos con el propósito de prevenir cualquier problema de Salud.
A reserva de los casos de algunas personas con intoxicación que se presentaron por consumo de tortas en mal estado, según trascendió, no hubo más incidentes a lo largo de los días de afluencia para visitar tumbas, apuntó el funcionario.