Vamos a realizar un ejercicio de memoria. ¿En qué empresa, organización o, incluso, centro de estudios te has sentido cuidado, escuchado y has notado que se hayan preocupado por tu salud, ya sea física o mental?
Sigamos con el ejercicio, ¿crees que al margen de realizar un trabajo, un servicio a una empresa o estudiar en un centro estos deberían ir un paso más allá y preocuparse por tu bienestar mental o físico? ¿Podríamos considerarlo hasta un derecho básico para cualquier trabajador?
Parece más extendido y generalizado dentro del mundo laboral aceptar las bajas por lesiones o enfermedades físicas que aceptar con normalidad que haya empleados que puedan solicitarlas por alguna problemática relacionada con su bienestar emocional. Es como si esas problemáticas no ocurriesen o estuviesen al margen del ámbito laboral.
Y mucho menos aceptado está que esa problemática mental se pueda derivar de las condiciones del propio trabajo o de las relaciones que allí se establecen entre compañeros, jefes, estilos de liderazgo o la cultura de la empresa. Supondría abrir un debate en la empresa que, en muchas ocasiones, resulta demasiado incómodo y que los líderes y direcciones generales prefieren evitar.
CONSECUENCIAS DEL MALESTAR EMOCIONAL EN EL ENTORNO LABORAL
Existe una amplia variedad de artículos que han estudiado cómo influyen los factores psicosociales del trabajo en el bienestar emocional de los trabajadores. Entre estos factores se pueden destacar el grado de controlabilidad/incontrolabilidad que percibe la persona sobre el trabajo que realiza y si las demandas laborales sobrepasan sus recursos personales y capacidades.
Si se mantienen en el tiempo este tipo de estresores, pueden afectar negativamente al bienestar emocional, derivando en altos niveles de estrés, trastornos de ansiedad, agotamiento o desgaste laboral (burnout) o estados depresivos. Además, el trabajador puede percibir negativamente su trabajo, las características del mismo, el propio espacio de trabajo, las relaciones con compañeros y tener emociones desagradables al respecto, llegando a la evitación y hasta a la fobia hacia el mismo.
Siguiendo datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), los trastornos de ansiedad y depresión son los más habituales entre los trabajadores de todo el mundo, con cifras por encima de los 300 millones de afectados en el caso de los trastornos depresivos y más de 260 millones que se ven afectados por problemáticas relacionadas con la ansiedad.
VENTAJAS DE INVERTIR EN BIENESTAR EMOCIONAL EN LA EMPRESA
Si se cuantifica en términos económicos, se señala que la pérdida de rendimiento y productividad ligados al bienestar emocional llegaría a la cantidad del billón de dólares por año. Como se podrá deducir, apostar por el fomento y promoción de medidas para mejorar el bienestar laboral tendrá como beneficio directo una mayor productividad, un menor absentismo y una reducción de pérdidas económicas.
La Ley 31/1995 del 8 de noviembre de prevención de Riesgos Laborales fijó las bases para regular la seguridad y salud de los trabajadores aplicando medidas y desarrollando actividades obligatorias para la prevención de riesgos relativos al trabajo. Sin duda, esta ley supuso un gran avance en el entorno laboral y permitió la emisión de sanciones en caso de incumplimiento de la misma. Sin embargo, esta ley aún no ha cubierto todo el amplio espectro de problemáticas asociadas a la salud laboral y, más en concreto, al bienestar emocional.
En España, algunas empresas, partiendo del cumplimiento de la Ley de prevención de Riesgos Laborales, han ampliado las coberturas y acciones planificadas para no solo prevenir, sino también intervenir y fomentar una cultura organizacional saludable, abarcando áreas tan diversas como la nutrición, la salud física, la conciliación, la igualdad y, por supuesto, el bienestar emocional. Surge así el concepto de "Empresa Saludable".
En la IIIª Edición del ´Observatorio IBEX 35. Salud, Bienestar y Sostenibilidad en las empresas del IBEX 35´, se explica cómo el 70% de las empresas del IBEX 35 ya han puesto en marcha iniciativas específicas sobre bienestar emocional para sus empleados.
Este porcentaje incluso es más alto, llegando al 88%, respecto a disposiciones de escucha activa para la mejora del bienestar y la cultura empresarial. Según el informe, el 88% de las empresas lleva a cabo medidas de escucha activa a los trabajadores, elemento fundamental en el proceso de integración de la cultura del bienestar en la empresa. Otro dato interesante es que el 39% de las empresas del IBEX 35 vinculan objetivos de salud y bienestar a la remuneración de los directivos y, en torno al 42%, reconocen estos términos saludables dentro de su mapa de riesgos laborales.
La Red Europea de Promoción de la Salud en el Trabajo (ENWHP) ha llegado a la conclusión de que cada euro invertido en programas de promoción de la salud en el trabajo da lugar a un retorno de entre 2,5 € y 4,8 € en relación al absentismo laboral y de entre 2,3 € y 5,9 € en coste de enfermedad.
Según la publicación del World Economic Forum (WEF), The Wellness Imperative, Creating More Effective Organizations, cuando el bienestar laboral se promueve activamente en el trabajo:
Las organizaciones son vistas 2,5 veces más eficientes.
Las organizaciones son vistas 3 veces más productivas.
Los/as trabajadores/as están 8 veces más comprometidos.
Las organizaciones son vistas 3,5 veces más enfocadas en la creatividad e investigación.
Las organizaciones son vistas 4 veces menos con probabilidades de perder talento en el próximo año.
BENEFICIOS PARA LOS TRABAJADORES DE DISPONER DE APOYO PSICOLÓGICO
Vemos a continuación, de manera más concreta, los múltiples beneficios que tiene para los trabajadores aplicar programas de apoyo psicológico en el entorno laboral:
Mejora la autoestima, confianza y responsabilidad con la empresa.
Mejora las habilidades de comunicación, habilidades sociales y las relaciones interpersonales a todos los niveles.
Disminuye la percepción de estrés ante la carga de trabajo.
Disminuye la probabilidad de sufrir trastornos de ansiedad, depresión y estrés.
El estado de ánimo y positividad de los empleados es directamente proporcional a la productividad, al rendimiento y a un clima laboral más positivo.
Aumenta la creatividad, concentración y participación entre los empleados.
Incrementa la calidad del descanso y la mejora del sueño y, como consecuencia, los empleados se encontrarán con más energía y más motivados.
La mejora en el bienestar emocional reforzará los procesos atencionales, de memoria y las funciones cognitivas en general.
Por el lado contrario, no apostar por una mejora del bienestar emocional del empleado mantendrá y acentuará problemáticas asociadas a un peor estado de ánimo y mal humor, dolores y molestias físicas, mayor irritabilidad, problemas relacionales incluidos los de pareja y la pérdida del deseo sexual; incapacidad de concentrarse, adicción a sustancias, malos hábitos alimenticios, pérdida o ganancia de peso, problemas para realizar trabajo de calidad, etc.
BENEFICIOS EMPRESARIALES DE APLICAR PROGRAMAS DE APOYO PSICOLÓGICO
Veamos ahora los beneficios empresariales de aplicar programas de apoyo psicológico en el entorno laboral.
1. CUIDADO DE LO MÁS IMPORTANTE DE TU EMPRESA, TUS TRABAJADORES
En ocasiones se nos olvida que una organización está formada de personas individuales que forman un colectivo. Si cuidamos a cada integrante tendremos una organización saludable, motivada y con un mejor rendimiento.
2. DESARROLLO DE LA RESPONSABILIDAD SOCIAL CORPORATIVA (RSC)
Las empresas ya no son meras productoras de beneficios económicos. Una empresa moderna y a la vanguardia debe proporcionar un impacto y beneficio a sus integrantes y a la sociedad en general. El apoyo al bienestar emocional es una de las medidas demandadas.
3. REDUCCIÓN DEL ABSENTISMO Y MEJORA DE LA CONCILIACIÓN DE LA VIDA LABORAL-FAMILIAR
Cuando tenemos empleados saludables a nivel mental, las bajas laborales disminuyen, van más motivados a trabajar. Además, a los empleados les hace afrontar las cargas laborales con mayores garantías y equilibrar su vida personal y profesional.
4. MEJORA DEL RENDIMIENTO
Hay diversos estudios que indican que un empleado con mayor bienestar tiene una mejor productividad. Parece lógico, pero no cuidar a tu empleado ni mejorar su equilibrio mental en el trabajo es un perjuicio notable para la empresa.
5. AUMENTO DE LA MOTIVACIÓN Y LA RETENCIÓN
En sintonía con el punto anterior, trabajadores más motivados se identificarán en mayor medida con la empresa y no buscarán otros empleos en el mercado laboral. Si cuidas a tu empleado él tendrá menos motivos para el cambio.
¿Qué incluye un programa de bienestar emocional en el ámbito laboral?
6. ENTORNO DE TRABAJO FÍSICO.
Cuidar los espacios, oficinas, mobiliario, etc. y que sean lugares atractivos y saludables para desarrollar cualquier tipo de trabajo. Incluso cuidar aspectos como la iluminación o el acceso a zonas naturales y, en su defecto, instalar áreas con zonas verdes y plantas que puedan mejorar el estado de ánimo.
7. TRABAJO PREVENTIVO E INTERVENCIÓN DE ADICCIONES
Ya sea en cuanto a sustancias nocivas como el tabaco u otro tipo de drogas o adicciones digitales, como el uso compulsivo de la tecnología.
8. ÁREA NUTRICIONAL
Pautas y formación de alimentación saludable e, incluso, proporcionar alimentos y bebidas en esa línea.
9. ENTORNO Y FACTORES PSICOSOCIALES
Definir bien las cargas de trabajo, funciones y puestos de trabajo para que los estresores no desborden las competencias de los empleados.
10. CONCILIACIÓN DE LA VIDA LABORAL Y PERSONAL
Ser flexible y dar facilidades para generar un buen equilibrio entre la vida personal, familiar, social y nuestro trabajo, siendo los jefes los primeros en dar ejemplo.
11. ÁREA DE COMUNICACIÓN
Enviar regularmente mensajes de cultura organizacional saludables y dar voz y voto a los empleados para expresarse con libertad.
12. ESCUCHA ACTIVA SOBRE BIENESTAR EMOCIONAL
Realizarla a través del departamento de recursos humanos, el departamento de salud u ofreciendo los servicios de psicólogos que asesoren o desarrollen una terapia psicológica a medida de las necesidades de los empleados. Psicólogos internos, que, al igual que los médicos de empresa, cuiden el bienestar psicológico de los trabajadores, y psicólogos externos que garanticen la confidencialidad de los procesos terapéuticos.
13. MEDICIÓN Y ANÁLISIS DE LOS RESULTADOS Y NUEVAS PROPUESTAS
Medir las acciones y compartir resultados y nuevas propuestas con los empleados, para tener así datos fiables a la hora de tomar decisiones sobre el programa de bienestar emocional.