A Mariana la asesinaron a golpes y después abandonaron su cuerpo en el sitio donde acostumbraba a reunirse con sus amigos, en la zona de Tepito.
La mujer tenía unos 40 años de edad y vivía en condición de calle.
Sus conocidos y vecinos aseguraron que desde hace dos años llegó a la Colonia Morelos, en la Alcaldía Venustiano Carranza.
Desde el inicio, comenzó a trabajar en los puestos y también recolectaba residuos reciclables.
Así conoció a otras personas que viven en la calle y se estableció en las inmediaciones del Frontón Tepito, ubicado sobre Calle Jarciería.
El miércoles, al filo de la medianoche, la vieron con vida por última vez ahí mismo.
A la mañana siguiente todos notaron su ausencia y alrededor de las 8:00 horas observaron que policías del Sector Consulado resguardaban un cadáver, a unos 30 metros de distancia del frontón.
La víctima estaba tendida sobre la banqueta, entre una cancha de futbol y un gimnasio al aire libre, justo en la esquina con Alfarería.
Estaba cubierta con una manta amarilla, pero sus manos estaban a la vista y por eso sospecharon que se trataba de Mariana; sin embargo, pudieron identificarla hasta que el personal de la Fiscalía de Feminicidios destapó el cuerpo y lo observaron de cerca.