Un hombre que hace casi 11 años, mató a golpes a su concubina llegó al final del proceso luego de una prolongada batalla judicial que concluyó con una sentencia de 14 años de prisión y la condena del pago de la reparación del daño.
Para Abelardo Vega Rivera, el 28 de abril del 2009 su vida cambió radicalmente, y todo empezó con una acalorada discusión que sostuvo con la mujer que tomó como concubina desde 3 meses antes.
Ella laboraba con sexo servidora y él sabía y la aceptó tal cual era, pero al paso del tiempo las cosas cambiaron, el amor acabó pronto y vinieron los problemas, las discusiones, los golpes, los insultos, hasta llegar a la muerte.
Ese día Abelardo esperó a su mujer en su casa y cuando sintió que llegó fue al escuchar fuertes golpes en la puerta de acceso, luego la vió entrar ebria y le reclamó.
Por el estado inconveniente de la mujer, ésta no aceptó el reclamo y empezaron a discutir para luego liarse a golpes.
Él la golpeó hasta dejarla inconsciente y la llevó hasta el baño para tratar de reanimarla, pero no lo logró y fue entonces que decidió vestirla y llevarla al lecho, donde la dejó, supuestamente dormida.
Él salió y acudió a casa de su progenitora donde le platicó lo que había pasado y ambos fueron a ver a la mujer, pero la encontraron muerta.
Luego dieron aviso a las autoridades y a él lo detuvieron.
El fiscal que conoció del caso ejercitó acción penal en su contra por homicidio calificado, pero un juez de primera instancia, consideró que las calificativas no se daban y sentenció en principio a 13 años 6 meses de prisión, pero la defensa apeló y logró hacer que se repusiera el proceso por algunas inconsistencias que después se subsanaron y al transcurrir 11 años sobrevino la sentencia de 14 años de prisión.