Mientras que el sector Salud descartó el resultado positivo en un caso sospechoso de coronavirus COVID-19 que se atendió en el Centro Integral de Justicia, las autoridades continuaban ayer con las medidas de prevención.
Personal del sector Salud se presentó el pasado sábado por la noche en el CIJ para cumplir con el protocolo en casos sospechosos de contagio, por lo que representantes del Supremo Tribunal de Justicia acordaron llevar a cabo una serie de medidas de prevención.
Se ordenó el cierre de los accesos al edificio situado en la colonia Puertas del Sol y en la sala estaría el juez que presidiría la audacia y su auxiliar y se permitió solo el acceso del imputado en dos carpetas procesales, así como sus defensores, los fiscales, asesora victimales, así como los Policías Procesales.
Obviamente, todos con guantes, tapa-bocas.
Aun cuando las audiencias eran públicas, no se permitió el acceso, ni a medios de comunicación, ni al público.
Ayer las medidas no habían cambiado, porque no se permitió la entrada a las salas a los medios de comunicación, ni al público.
Los Policías procesales tenían instrucciones de mantener cerradas las puertas para los particulares que quisieran asistir a las audiencias.
Explicaban que se trataba de una medida de prevención por la emergencia que se vive en México y el mundo por la pandemia.