Con, por lo menos unas dos líneas, elementos de la PGJE llevan a cabo las investigaciones en torno al proditorio asesinato de un herrero, registrado el pasado martes en la colonia López Portillo. Autoridades confirmaron que el cuerpo de Ignacio N., presentaba un solo impacto que le dispararon a quemarropa.
El hombre vio al criminal y trató de llevar a cabo un acto defensivo de manera instintiva. Es decir Ignacio al ver que le disparaba levantó una de sus manos y con ella quiso detener el proyectil, literalmente.
En una inspección ocular que se realizó en la escena del crimen, no se encontró proyectil alguno, al parecer solo hallaron la ojiva pero será en el laboratorio de balística donde podrían determinar el calibre y tipo de arma que se disparó.
Se mantienen en reserva algunos datos relacionados con el vehículo que emplearon el o los asesinos para llegar y escapar.
Sobre el móvil no se tiene precisado ningún dato, pero en base a algunas situaciones los investigadores abrieron dos líneas de investigación.
RECLAMAN EL CUERPO
El cuerpo de Ignacio N., fue reclamado por la esposa, pero no lo habían entregado debido a que hasta ayer no presentaron documentos oficiales para comprobar el parentesco.