Ciudad de México
La boda del príncipe heredero Hussein, de 28 años, y la arquitecta saudí Rajwa Alseif, de 29, atrajo a una lista de invitados repleta de estrellas, entre ellos el príncipe Guillermo de Inglaterra y su esposa Catalina, así como la primera dama de Estados Unidos, Jill Biden.
Las celebraciones tienen un gran significado para la región, ya que destacan la continuidad en un Estado árabe apreciado por su larga estabilidad y refrescan la imagen de la monarquía tras una disputa palaciega. Incluso podrían ayudar a Jordania, un país de escasos recursos, a forjar un vínculo estratégico con su vecina Arabia Saudí, rica en petróleo.
La novia, con un elegante vestido blanco del diseñador libanés Elie Saab, llegó al palacio de Zahran en un vehículo Rolls-Royce Phantom V de 1968 hecho a medida para la difunta bisabuela del príncipe heredero. El príncipe heredero llegó antes, vestido con uniforme militar de gala y un sable con empuñadura de oro.