Siempre aposté a la decencia

Nunca se drogó ni se emborrachó, tampoco tiene una historia de escándalos. Dulce aprendió de su madre el ejemplo de trabajo y esfuerzo, pero sobre todo, a honrar su memoria

Ciudad de México

La cantante ni siquiera contempla la idea de llevar su historia a la pantalla de televisión a través de una bioserie o documental porque, dijo, su vida es quizás para muchos, un tanto aburrida.

"Yo tengo una vida muy sencilla, una vida bonita. A mí nadie me violó, nadie me pegó ni me drogó. No anduve borracha, nunca me tuve que meter con alguien para lograr algo. La mía es una historia muy aburrida", expresó la originaria de Matamoros.

"Soy una persona que siempre aposté a la decencia, honradez, el buen comportamiento, honorabilidad, dignidad y eso a nadie le interesa. Le aburre a la gente. Nunca han dicho: ´Mira, ahorita anda con este y mañana con aquel o la hija anda de loca o ella anda drogada o la vimos borracha".

Consideró que su vida es de lucha y trabajo, apostando por la dignidad y honestidad.

A sus 67 años, la cantante camina con la frente en alto porque ella creció con una educación de la vieja escuela. La suya, agregó, siempre fue una propuesta de vida en la que buscó estar lejos de los escándalos.