Sus propietarios y operadores los abandonaron por diversas razones: disminución del público, desastres naturales, dificultades financieras o simplemente porque ya no eran relevantes para los visitantes de hoy en día.
Pero conservan su fascinación, son lugares fantasmagóricos que atraen a exploradores urbanos, divas de las redes sociales y personas que buscan revivir los recuerdos de una visita en familia o con amigos.
HÓ THÚY TIÊN, VIETNAM
Un gigantesco dragón de concreto que albergaba un acuario sigue haciendo guardia sobre un lago que fue la pieza central del parque acuático Hó Thúy Tiên, cerca de Hue.
Los problemas financieros hicieron que el parque solo abriera de forma intermitente entre 2004 y 2011.
Hoy en día es una atracción turística no oficial, y el dragón en decadencia, los toboganes de agua y otros elementos parecen más ruinas de hace 1.000 años que una atracción del siglo XXI. (Crédito: dragoncello/Alamy Stock Photo)