La mayor parte del extenso terreno con el que cuenta el ejido Río Bravo, que se localiza entre lo que es el edificio de Justicia Tamaulipas y el Conalep, se encuentra enmontado.
La hierba y maleza han crecido, de tal manera, que cubren una buena parte de lo que es la banqueta por donde a diario pasa gran cantidad de estudiantes y también quienes acuden a las oficinas de gobierno.
Durante el día, pero mayormente al caer la tarde, y noche, aflora gran cantidad de todo tipo de animales, principalmente de plagas de zancudos y animales alados, además del panorama de inseguridad que representa para los peatones en general, y alumnos.
Anteriormente, era el ejido el que le daba mantenimiento, pero se ha dejado de lado, y también a ello se debe lo enmontado en que hoy en día se encuentra.