Los módulos que supuestamente funcionaron durante la pandemia en los cruces internacionales de Río Bravo, tienen semanas que desaparecieron, sin que oficialmente haya habido una explicación de su retiro.
En visita a las instalaciones del puente Río Bravo-Donna, se puede constatar que en el acceso al cruce internacional, tanto de México a Estados Unidos, como de la Unión Americana a nuestro país, ya no se ubican los tan polémicos módulos.
Estos puntos de revisión eran conformados por personal de Coepris, personal médico de la Secretaría de Salud y Policía Estatal, pero ya no se encuentran más revisando el ingreso de automóviles, sobre todo de personas que provienen de la Unión Americana, residentes o ciudadanos de ese país, que en teoría solo deberían ingresar para asuntos esenciales, entran libremente.
Personal de salud, quien pidió reservar su identidad, indicó que fue paulatino el desmantelamiento de esos módulos. “Primero nos quitaron el apoyo de la Policía Estatal, luego nos dejaron de enviar insumos (cubrebocas, caretas, guantes, termómetros, baterías)”, hasta que finalmente ya no pudieron laborar.
Si bien se contempla el retiro de estos módulos en donde aún funcionan, en este municipio desde hace semanas dejaron de hacerlo, tanto en la cabecera municipal como en Nuevo Progreso.