Luego de que se encendieran las alarmas en el Centro de Bachillerato Tecnológico y de Servicios número 73 en esta localidad por supuestas amenazas de muerte tanto a maestros como estudiantes, el director descartó que se vayan a suspender las clases, aunque sí mermó la asistencia escolar en ambos turnos en un 25 y 30 por ciento, pero ya se regresó a la normalidad.
Abordado por este medio de comunicación el maestro Horacio Tovar Cano, director del Cbtis número 73, explicó al respecto que se solicitó, de acuerdo al protocolo escolar, el apoyo de las autoridades de la Policía Estatal, local, y federal en horarios claves de entradas y salidas, por la mañana, al mediodía, y por la tarde para mayor seguridad.
"No es tanto que haya afectado, sino que nosotros dimos la oportunidad a los padres de mandar o no a los hijos a la escuela con la consigna de que nosotros justificaríamos la inasistencia, para darles certidumbre, y evitar la zozobra".
Afortunadamente se recibió el apoyo de los tres niveles de gobierno en cuanto a vigilancia y seguridad, y de hecho la Policía Cibernética ya está investigando el hecho sobre el atentado.