Animalistas de Río Bravo instalaron a mediados de octubre de este año bebederos y comederos para animales de la calle, sobre todo canes y alguno que otro gato, pero la buena intención duró poco.
Resulta que esta semana se pudo apreciar cómo dichos aditamentos que contenían agua y croquetas instalados en plaza Ignacio Zaragoza (Los Enamorados), fueron arrancados.
Dichos bebederos y comederos, consistían en líneas de PVC de cuatro pulgadas de diámetro, y de más de dos metros de altura; ahora ya no se encuentran y no hay rastros de ellos.
No obstante que la legislación contra el maltrato animal, ha avanzado, en las hechos ninguna autoridad la aplica, dejando a los animales callejeros en la misma situación en que se encontraba antes de las leyes de protección de animales domésticos.