Personas que no alcanzaron a comprar los víveres necesarios para la cena de Nochebuena, ni el regalo para ese ser querido esta Navidad, abarrotaron la zona centro la tarde del jueves, sobre todo peatones que buscaban en locales comerciales diversos productos, desde juguetes, celulares, joyas, ropa, electrónicos, enseres o línea blanca.
La aceras del primer cuadro de la ciudad lucían abarrotadas, pese a que la contingencia sanitaria, exhorta a guardar la sana distancia de por lo menos dos metros entre persona y persona, igualmente algunos se retiraban el cubre bocas, aún en presencia cercana de otras personas ajenas a su círculo familiar.
Atareados algunos compradores, trataban de subir "pantallas" superiores a los 40 pulgadas a camioneta estacionadas sobre el paso vehicular, obstruyendo la vialidad, otros recorrían varias cuadras con sus regalos en la mano, pues no encontraron estacionamiento cerca de las tiendas departamentales.
Igualmente los cajeros automáticos, lucían abarrotados por tarjetahabientes tratando de sacar algo de efectivo, antes de que los dispensadores automáticos de dinero, quedaran vacíos.
Muy agitado y atropellada fue la tarde del 24, a las que se le sumó en algunos puntos, el caos vial propio de la época, pues los compradores de última hora, buscaban salir avantes con la cena o el presente para ese ser especial de la familia o para alguna amistad.