Riobravense va a Diablos de Jalisco

Homero Tovar Delgadillo sólo cuenta con 17 años, y por su amor al balompié ya tuvo que dejar su ciudad para vivir en Jalisco

No todos los jóvenes deportistas debutan pasando por la puerta grande; hay quienes empiezan desde abajo, pero no por ello con sueños menos esperanzadores.

Homero Tovar Delgadillo sólo cuenta con 17 años y por su amor al balompié ya tuvo que dejar Río Bravo para mudarse de lleno al estado de Jalisco.

Fue su madre, Guadalupe Delgadillo, quien dio a conocer el fichaje de su retoño por parte del club deportivo Diablos Tisistán, en la Tercera División.

Homero empezó a jugar desde los 8 años y desde muy niño adoptó la disciplina y el sacrificio que a tan temprana edad ya le empiezan a abrir puertas.

Lupita, su mamá, pese a tener el alma en vilo, ruega a Dios porque cuide a su hijo, pues éste, pese a ser menor, le dio la sorpresa a su madre sobre el fichaje; ahora lo apoya incondicionalmente y es su orgullo.

El arduo entrenamiento y sus ganas por despuntar en este competido ámbito futbolístico, será lo que nos muestren de qué está hecho Homero.