La mayoría de la gente lo conoce como el payaso “Tubito’, su nombre es Josué Macías Ríos, nació en Río Bravo, Tamaulipas, tiene 32 años y desde que tenía 13, se dedicó a la hermosa labor de servir como bombero, junto a su padre el señor Juan Manuel Macías González (+) destacado bombero e instructor de seguridad que trabajó 31 años como director de Protección Civil y Bomberos en esta ciudad, quien se destacó en todo el país por su gran labor.
Del ejemplo que le dejó su padre, nace el amor por ayudar a la gente de manera altruista organizando eventos de apoyo a la comunidad más vulnerable de este Municipio, teniendo gran aceptación entre la población.
Josué ha sido paramédico de la Cruz Roja y es instructor de seguridad, se dedica a dar cursos de manejo de extintores, primeros auxilios, entre otros, además de atender un negocio de equipos contra incendios.
Fue un niño muy inquieto por eso sus padres le forjaron valores, es por eso que tuvo una infancia muy bonita, recuerda que era de esos niños que le gustaba correr descalzo y andar en bicicleta, disfrutaba mucho salir a mojarse con la lluvia, pero siempre escuchaba el consejo de sus padres.
En una ocasión hace 8 años, representó a un payaso llamado Tristín en una obra de teatro que realizaron en su iglesia, y el público presente no dejaba de reír y ovacionarlo, fue tanto su éxito que la gente lo empezó a invitar a hacer shows a sus fiestas familiares, y aceptó, entonces decidió que debería dedicarse al entretenimiento. Así que fue a visitar al payaso Bolín, a quien admira mucho, para pedirle consejo, ahí también se encontraba otro compañero, el payaso Tórombolo, ellos le dijeron que se tenía que cambiar el nombre, porque un payaso no podía ser Tristín, así que sin pensarlo Tórombolo le dijo, te llamarás Tubito, a Josué le agradó la idea y así se hizo llamar.
Macías Ríos comenta: “Para aprender más sobre esta hermosa profesión, tuve la oportunidad de acompañar a Bolín a sus shows, algo que agradezco con el corazón, porque aprendí mucho de él, prácticamente yo le cargaba las maletas”.
El más grande sueño de Josué es poder seguir ayudando a las personas más necesitada, por lo pronto es feliz arrancándoles unas sonrisas y carcajadas para hacer sus días más fáciles y llevaderos, mientras apoya recaudando y entregando útiles escolares, ropa, comida, cosas que la gente necesita.