La subcultura que ha impuesto un segmento de motociclistas que contravienen todo tipo de normas del Reglamento de Tránsito, permea de generación a generación, como se puede apreciar en las calles de Río Bravo.
Motociclistas que se acostumbraron a violentar las normas de vialidad, tales como el uso de casco; no más de dos en el biciclo; transitar erráticamente y en esta emergencia sanitaria, uso de cubrebocas.
Estas omisiones, se pasan a los más jóvenes, quienes las reproducen al salir a pasear en moto o incluso cuando cumplen alguna labor.
Un infractor con una mejor y una mujer a bordo de una moto, todos sin casco, fueron captados en calle Independencia, entre Oriente 6 y Galeana, manejando erráticamente, sin respetar las reglas de vialidad, sin que fueran molestados y sin inmutarse ante algunos vehículos con los que estuvieron a punto de impactar.
Cada vez son más comunes este tipo de infractores, los cuales no solo arriesgan la vida e integridad de ellos y sus acompañantes, sino la de terceros, ya sean peatones, ciclistas, otros motociclistas e incluso automovilistas.