La muerte de una niña de solo 4 años, registrada el 7 de julio y de la cual dieron fe autoridades de la UGI-4, pudo haber pasado como consecuencia de un accidente casero, de no haber sido por el interés con que personal del área de investigaciones de la PGJE siguieron el caso, hasta sacar a flote las verdaderas causas del fallecimiento.
La pequeñita había sido víctima de brutal golpiza, por parte del padre que en presencia de la progenitora la azotó hasta dejarla con órganos internos estallados.
La golpiza, según las investigaciones fue porque la niña había hecho sus necesidades fisiológicas en la cama durante la madrugada. El hombre no soportó eso y la golpeó salvajemente, estando presente la madre.
Los investigadores adscritos a la UGI-4 no creyeron la versión de la caída y se emplearon a fondo, logrando establecer que la muerte había sido provocada con todas las agravantes de la ley.
Los investigadores, coordinados con peritos de la PGJE aportaron los datos necesarios para que la fiscalía integrara la carpeta de investigación por delito de homicidio calificado, en contra del padre de la menor y de la progenitora.
En contra de uno por la comisión del delito en mención, pero en contra de la madre por delito por omisión, es decir, ella pudo haber evitado la golpiza y no lo hizo; permitió que su esposo golpeara de la manera más cruel a la pequeña.
Ambos la llevaron, tras la golpiza, a la clínica Aeropuerto que se ubica por la carretera a Río Bravo el 7 de julio del presente año, pero ahí falleció. Los médicos no pudieron hacer nada por rescatar a la niña de las garras de la muerte.
Los adultos tratando de encubrirse mutuamente dijeron que la niña se había caído, pero los investigadores advirtieron muchas cosas raras y decidieron profundizar interrogatorios, entrevistas e inspecciones oculares hasta llegar a la verdad histórica de un hecho criminal altamente reprobable.
EJECUTAN APREHENSION.
Ayer en un juzgado de control fue presentada Cristina Agapita N, tras de cumplimentarse la orden de aprehensión en su contra por delito de homicidio calificado en agravio de su pequeña hijita.
La mujer fue enviada al CEDES con prisión preventiva por lo que dure el proceso, tras de que la fiscalía formuló cargos en base a la investigación realizada por personal adscrito a su Unidad.