La Tarde / Staff
Entre las causas de muertes violentas en menores destacan los accidentes de tránsito, con un promedio de cuatro a cinco casos por año, aunque los suicidios también se ubican entre las causas de decesos violentos de niños y adolescentes, en un 50 por ciento menos que los percances viales.
Personal del sector indicó que las muertes de menores por causas naturales o no violentas no se contabilizan detalladamente en las estadísticas policiales, ya que por lo general ocurren en los hospitales y ahí se aplica otro procedimiento legal al respecto.
En el renglón de muertes naturales de menores, estas son más frecuentes en niños recién nacidos, por padecimientos congénitos u otras enfermedades. Comúnmente se llama “muerte de cuna” a este tipo de deceso.
En cuanto a las muertes violentas ocurridas el año pasado en accidentes de tráfico, los menores que resultaron como víctimas viajaban con adultos o familiares.
Respecto a los suicidios de niños y adolescentes, la mayor parte tienen su origen en desavenencias familiares o situaciones afectivas.
Los casos de suicidios son más frecuentes en personas adultas o jóvenes mayores de 18 años, principalmente por problemas económicos, de adicciones o sentimentales, entre otras causas.
En cuestión de muertes violentas por situaciones delictivas, aunque son numerosos los casos de jóvenes que han fallecido por esa causa, no se tiene registrada la muerte de adolescentes.
En algunos casos, inicialmente las autoridades se habían confundido al considerar como menores a algunos los abatidos, por la apariencia de adolescente o “cara de niño” que presentaban, lo cual posteriormente fue desechado con la documentación legal de los occisos, que los acreditaba como personas mayores de edad.