El cadáver del cliente quedó tendido a un costado de la mesa donde convivía hasta que lo atacaron con un arma de fuego.
Era un hombre de unos 45 años, de complexión robusta, tez morena y cabello corto.
Llevaba unas botas café, pantalón de mezclilla y una chamarra azul.
Según reportes de las autoridades, el agresor fue otro sujeto con quien tuvo un desencuentro.
El crimen se registró durante la madrugada de ayer, mientras ambos bebían dentro del bar El Barbón, un negocio de la Colonia Santa María Chiconautla que ofrece alitas, costillas y micheladas.
Eran las 1:00 horas, cuando los agentes municipales recibieron un reporte de disparos sobre Avenida Veracruz y minutos después verificaron que todo había ocurrido en el establecimiento.
Al ingresar descubrieron que el empistolado ya había escapado y observaron a la víctima inconsciente en el suelo, por lo que urgieron una ambulancia.
Los paramédicos de Protección Civil sólo confirmaron que ya había muerto y que dos balas traspasaron su chamarra y se le incrustaron en el pecho.
A un costado, hallaron tres cartuchos percutidos calibre 9 milímetros y rastros de sangre.
Los únicos testigos que se animaron a hablar con los uniformados les explicaron de forma escueta que primero escucharon el intercambio de insultos y enseguida vinieron las detonaciones.
También vieron que el asesino corrió para escapar, pero no aportaron detalles sobre sus características.
El establecimiento permaneció bajo resguardo policial, hasta que el personal de la Fiscalía concluyó los peritajes y trasladó el cadáver al anfiteatro.