Las autoridades investigan el robo como motivo, pues en la casa faltaba una camioneta.
Eran poco antes de las 17:00 horas de ayer cuando los familiares de las víctimas acudieron a la casa en la Calle General Lucio Blanco, cerca de Privada Primero de Mayo porque no podían comunicarse con ellos y se preocuparon.
Ahí fue donde hallaron los cuerpos de Nazario, de 60 años, y de Gustavo, su hijo, en una cama, por lo que llamaron a las autoridades.
Miembros de la Policía Metropolitana fueron los primeros en llegar al lugar, pidieron que acudieran paramédicos en una ambulancia y la presencia de personal de la Fiscalía, así como del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses.
El joven de 20 años había sido estrangulado y los paramédicos determinaron que tenía aproximadamente 8 horas de evolución cadavérica. Era estudiante.
Mientras que su padre tenía entre 4 y 6 horas de haber muerto. Los asesinos le ataron los pies y le dispararon en la cabeza.
Sus seres queridos explicaron que se dedicaba a la agricultura.
Comenzaron a revisar la vivienda y de forma preliminar declararon que faltaba una camioneta.
La Fiscalía de Jalisco inició con las investigaciones para aclarar si los homicidios se derivaron del robo y para buscar pistas de los asesinos.