Rastros de violencia

Verdadero infierno es el que siguen viviendo infinidad de productores, y trabajadores del campo tamaulipeco

Un verdadero infierno es el que siguen viviendo infinidad de productores, y trabajadores del campo tamaulipeco, ante la alta ola de violencia e impunidad en la que se sigue viendo envuelta la ciudad y sus habitantes.

Esto ante la férrea disputa de los grupos delincuenciales que, ante la tibia respuesta oficial crecen como la espuma, tristemente, a costillas de las familias ríobravenses.

Fiel reflejo lo viven a diario tanto los dueños de parcelas como el sector laboral en el campo, y la prueba más fehaciente son los vestigios de los cruentos enfrentamientos que dejan las bandas del crimen organizado con los llamados "monstruos".