Mi Reynosa

Amor verdadero al cemento y la cal, así como a la cuchara y la pala el de los albañiles

Aprende oficio por medio de su tío y 30 años después es su forma de sostén para su familia

  • Por: NUBIA RIVERA JUÁREZ
  • 04 MAYO 2018 - .
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“Es bien bonito, para el que le gusta es bien bonito, al que no le gusta solo viene por el dinero”, dijo Andrés Orozco Lira, albañil.

Desde los 10 años se interesó por la albañilería y vivió desde temprana edad en el mundo de las construcciones junto con sus tíos, ahora tras 30 años de dedicarse a este oficio, agradece por la oportunidad que le dio la vida para ser albañil.

“Un tío me enseñó albañilería, cuando tenia 13 años ya andaba yo en las construcciones con mi tío, y a los 16 años me dieron mi número social y me empecé a meter de lleno a las construcciones de casas, todo eso, construyendo en distintas empresas, es bien bonito, para el que le gusta es bien bonito, al que no le gusta solo viene por el dinero”, dijo Andrés Orozco Lira, albañil.

Con 43 años de edad, ha dedicado su vida a trabajar con pala, pico y todo tipo de materiales de la construcción, ha laborado para empresas, en construcción de viviendas  y para el gobierno.

“A mi me fascina ser albañil, yo vivo, como, almuerzo y ceno y tengo a mis hijos todo de la albañilería, se poner todo, vitropiso, azulejo, todo lo que es bardas, placas, todo me encanta y me fascina la albañilería”, expresa con gran orgullo.

En sus 30 años de experiencia nunca le ha pasado algún problema de riesgo, solamente las clásicas caídas o pinchadas con clavos, por lo que agradece a Dios por los cuidados.

“No me ha pasado nada, solo puros clavos, caídas, una tabla que le pegue a uno, andamio, pero jamás un accidente grande, ni me he quebrado huesos, ni nada, pero si me he caído muchas veces”, dijo.

Andrés reconoce que la mayoría de los albañiles les gusta tomar alcohol, pero en su caso prefiere dedicar ese tiempo a su labor.

“No fumo y no tomo, soy la deshonra de los albañiles, porque son bien borrachos, pero yo no, siempre en mi trabajo”, expresa entre risas.

En el día de la santa cruz, Día del Albañil que se celebró ayer jueves, junto con sus compañeros celebraron trabajando, ahora el es encargado de las obras, lo que común mente se conoce el “maestro”.

“Nosotros nunca celebramos, solo así alguna comida, por lo regular no la pasamos aquí así nada más, los que celebran son las de las construcciones grandes, ellos si festejan nosotros no, para nosotros siempre es un día de trabajo normal, nos cooperamos algo y es todo”, explica.

CELEBRA

 Como cada año, el 3 de mayo la iglesia católica celebra el Día de la Santa Cruz. Para los trabajadores de construcción también celebran hoy el Día del Albañil.

La también llamada “Fiesta de las Cruces” se celebra en ciudades de España, Chile, Ecuador, El Salvador, Guatemala, México, Paraguay, Perú, Trinidad y Tobago, Argentina, Colombia y Venezuela. 

En algunos lugares de México, los festejos incluyen comidas donde se realizan las obras de construcción, visitas a iglesias y agradecimientos religiosos por el trabajo que les ocupa. Los albañiles tienen la costumbre de colocar en lo alto de las fachadas de las casas en construcción, una cruz de madera adornada con flores y papel china, previamente bendecida por un sacerdote.\


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