Hacen negocio con los tambos
Compras de pánico de agua embotellada, cobros excesivos de contenedores para juntar agua y familias almacenando hasta la última gota que salía de las llaves fue lo que vivió Reynosa ayer en un día diferente por un megacorte del suministro
Largas filas se registraron ayer en diversos negocios de Reynosa donde se comercializan tambos de plástico, debido al interés de la ciudadanía por obtener un contenedor donde se recolecte agua y sobrellevar así, el mega corte de hasta 48 horas que anunciaron autoridades municipales.
Sobre la Avenida Rodolfo Garza Cantú, poco después del medio día se observaba hasta una decena de vehículos formados esperando su turno
El costo era de más de 600 pesos por un contenedor de 200 litros. “No hemos podido comprar un tinaco para instalarlo en la casa, sale muy caro, por eso cuando nos enteramos que iban a cortar el agua juntamos el dinero para este tambo, esperemos que nos dure dos días que es el plazo que dieron las autoridades“, comentó Rafael, habitante de la colonia Juárez.
“Nos estamos tratando de prevenir con un tambo para recolectar algo de agua, venimos de la colonia Balcones de Alcalá, vamos a usar el agua para lo más esencial, el baño, lavar algunas cosas e higiene, tenemos que usarlo de manera inteligente para que dure”, comentó Juan García.
Las compras eran rápidas y por momentos se llegaron a agotar los tambos.
En otra colonia como La Laguna, también hubo filas afuera de negocios donde se vendían tambos. “Les hemos pedido a los clientes que se esperen para entregárselos, los están trayendo de otra sucursal, hemos tenido mucha gente desde las 9 de la mañana que abrimos, todos se lo llevan para juntar agua”, refirió Laura, vendedora.
El pánico por quedarse sin agua llevo algunos a comprar dos y hasta tres contenedores.
Además al tomar en cuenta que en algunos sectores el suministro de agua comenzó a escasear desde la noche del martes. “En la casa somos 7 personas, tres de ellos niños que van ahorita a clases de verano, pero desde el martes no tuvimos agua, entonces vamos a comprar dos tambos para irlos a llenar lo más que podamos con mi suegra y llevarlos a la casa, porque tampoco sabemos si nos van a mandar pipas”, refirió Eugenio, habitante de la colonia Almaguer.
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