Sólo hay 10 personas en la Casa del Indigente

Al mantenerse la alerta sanitaria por el Covid-19 en Reynosa con semáforo rojo, dentro de la Casa del Indigente de Reynosa se vigilan las visitas y las salidas de las personas que están ahí refugiadas. 

De acuerdo con el presidente del patronato, Adolfo Sevilla,  esto es para garantizar cero contagios, al tratarse de personas vulnerables quienes ya cumplieron con su esquema de vacunación.

En la actualidad solo hay 10 indigentes, hombres y mujeres que obtienen alimentos, hospedaje, así como atención medica integral. 

“Nosotros tenemos mucho cuidado con las personas que están aquí en la casa del indigente, sobre todo en esta temporada cuando el virus va creciendo y que en los alrededores se ha llenado de migrantes, vigilamos mucho la parte médica porque son personas muy vulnerables, afortunadamente ya tienen todas las vacunas, siguen un protocolo preventivo”.

En los meses más críticos de la pandemia se restringieron las visitas y las salidas de indigentes a la calle, a excepción de los servicios médicos y de atención a protección civil que constante acuden a revisarlos.

Actualmente, la casa del indigente se apoya con otros organismos de gobierno. 

“Hemos recibido a algunas personas que nos reportan las autoridades y también nos hemos apoyado mucho con la casa de asistencia para adultos mayores, esta casa se mantiene de donativos, se les da comida, bebida, hay áreas limpias, atención médica, seguimiento”.

No hay un censo que evidencie cuántos indigentes hay en Reynosa, pero Sevilla reconoció que los 10 refugiados es un número simbólico, en contraste a la necesidad que hay en las calles.

Por lo que constantemente se realizan brigadas para ofrecer el espacio a nuevos indigentes, bajo el concepto de que ninguno puede estar en contra de su voluntad.