Advierten un difícil panorama para crear empleos

La pérdida de empleos registrada el mes pasado puede constituir una primera señal de un cambio de tendencia en el mercado laboral, por un escenario más retador, de menor dinamismo económico y ante una creciente inflación en lo que resta del año, dijeron especialistas.

La fuerte recuperación del empleo entre febrero y abril de 2022, periodo en el que se crearon 2.1 millones de plazas, se interrumpió en mayo, al reportarse una pérdida de 518 mil puestos, de acuerdo con el Inegi.

“El mes de mayo no suele tener presiones estacionales adversas, por lo que la baja en este mes es otra de las señales que alertan de un cambio de vientos en el devenir económico”, advirtió Daniel Arias, analista económico de Monex.

Asimismo, la reducción de la población ocupada se vio reflejada en un deterioro de las tasas de desempleo y de participación laboral. La primera pasó de 3.0% a 3.3%, mientras que la segunda bajó de 60.1% a 59.6%, lo que hizo a mayo el mes de mayor deterioro en 10 meses, agregó.

“Este segundo semestre va a ser muy complicado en materia laboral, incluso el propio Banco de México estima en términos anuales que no se van a generar más allá de 582 mil nuevos puestos de trabajo formales, es muy pesimista, pero está muy ajustado a la expectativa de crecimiento económico para todo el año, de alrededor de 1.8%”, dijo a su vez Raymundo Tenorio, profesor emérito e investigador del Tec de Monterrey.

La desaceleración económica y la alta inflación limitarán la expansión laboral, recalcó.

“Al estar creciendo los precios al ritmo que lo están haciendo, la gente pierde poder adquisitivo y compra menos bienes. La demanda se reduce junto con la producción y eso se traduce en la generación de menos empleos”, explicó el académico.

Otro aspecto que llama la atención es que en mayo la pérdida de plazas formales superó a las que no lo son. Del total de empleos perdidos, 272 mil (53%) correspondieron al sector formal de la economía y los restantes 246 mil (47%) eran informales.

Por grandes sectores, el agropecuario reportó la mayor eliminación de plazas en mayo, con 267 mil puestos menos, debido en parte a que los cultivos terminaron el ciclo primavera-verano en abril.

El otro sector que perdió una gran cantidad de empleos fue el de los servicios, sobre todo los relacionados con el gobierno, donde se eliminaron 315 mil plazas, constituyéndose como la segunda mayor pérdida desde el inicio de la pandemia de Covid-19 en esta actividad, lo que podría avisar de presiones para la reducción del gasto público.

En la industria destaca el caso de la construcción, donde se eliminaron 33 mil plazas.

“La caída del empleo en la construcción afecta también a otras ramas, como producción de vidrio, madera, plásticos. Entonces, al desocuparse trabajadores de la construcción, se desemplean los de empresas relacionadas”, destacó Tenorio.

Cambio de tendencia. Aunque el deterioro del mercado laboral en mayo es moderado, la mejora que le ha precedido ha sido sobresaliente y parte del ajuste tiene que ver con algunos efectos rebote, estimó Arias.

No obstante, es indudable que la economía se enfrenta a un cambio de tendencia y “será difícil que los resultados de los próximos meses sean buenos como se dieron hasta abril”, recalcó.

Los resultados de mayo fueron sorpresivos, dado que la información disponible sugería que las condiciones eran adecuadas para una mejora adicional en el mercado laboral, destacó un análisis de Banorte.

“Considerando ciertas distorsiones estacionales, es necesario esperar más información para evaluar si esto es sólo una pausa en la recuperación, o un cambio en la tendencia”, destacó.

Hasta ahora, para junio, las señales apuntan a un escenario más retador. Particularmente, los casos de Covid-19 han estado al alza, lo que ha probado tener un efecto en las condiciones de empleo en las olas previas.