Beber agua durante las comidas, ¿engorda?
Nunca más una operación bikini con estos consejos
Existe la creencia de que el agua engorda si se toma durante las comidas. ¿Qué hay de cierto en ello? Lo hemos descubierto junto a la química experta en nutrición clínica Ángela Quintas en el programa de BuenaVida en Ser.
La autora del libro Adelgaza para siempre y Paco Becerro, periodista gastronómico conversaban con Marta Nebot, directora y presentadora del espacio —en el que colabora con Marta del Valle, directora de BuenaVida—, y varios expertos en el tema en la segunda edición del programa.
“No solo somos lo que comemos, sino también, lo que bebemos”. Así comenzaba su intervención el presidente de la Fundación Española de la Nutrición (FEN), el doctor Gregorio Varela-Moreiras, en el acto inaugural del II Congreso Internacional y IV Nacional de Hidratación.
Y en lo que se refiere al agua es todo salud, puesto que tiene cero calorías tomada al principio, durante o al final de la comida, por más teorías de toda clase que circulen.
Según un ensayo clínico publicado en 2010, beber agua justo antes de una comida puede, si acaso, engañar al estómago para que comamos menos.
Esta hipótesis fue presentada en la American Chemical Society en Boston (EU), y concluyó que quienes bebieron dos vasos de agua de 230 mililitros justo antes de una comida consumieron entre 75 y 90 calorías menos.
En cuanto a las necesidades diarias, son muy difíciles de evaluar, puesto que depende de muchos factores.
“Lo más importante para estar bien hidratados es mantener en equilibrio el volumen ingerido con el excretado; aumentar el consumo si realizamos ejercicio intenso y en épocas de calor; leer la información nutricional de las bebidas que consumimos, tomar infusiones ligeras, sopas o bebidas bajas en calorías o lo que es lo mismo, todas las que contengan un 80% de agua y menos de 50 mEq/l de sal, y seguir una alimentación variada, moderada y equilibrada”, como contó Carmen Pérez-Rodrigo, presidenta de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC).
Por eso, en BuenaVida en Ser nos hemos despedido para siempre de este y muchos otros mitos que rodean a las “dietas milagro”.
“Se acabó el sube y baja de peso sin destino, el llevo toda la vida a dieta y sigo igual de gordo, el nunca tomo postre o el a mí ponme poquito”.
Quintas nos revela todas las respuestas que nos harán comer bien para siempre.
Además, Marta del Valle recuerda que la clave de la pérdida de peso no tiene que ver con beber o no beber agua durante las comidas, sino precisamente, con controlarnos comiendo.
Y no hay “operación bikini” que se pueda equiparar a ese consejo.
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